Un nuevo viaje: Costumbres de Chile

Hola de nuevo

¿Que tal va el veranito por allí? Espero que muy bien, porque aquí de momento hace mas frió en las casas que en la calle, como no tienen calefacción, y las horas de sol, son menos, se esta mejor fuera de casa que dentro, eso sí, el día que sale el sol, porque los días de niebla, es mejor no salir. Aunque se que ha sido una semana muy triste para España, sobre todo para Galicia, desde aquí todos los españoles dan muestras de apoyo para las familias de alguna manera.

Antes de nada deciros que, todavía no he encontrado piso, han sido las vacaciones de invierno, y la gente ha aprovechado para hacer turismo en la Serena, por lo que la gran mayoría de los pisos estas ocupados y hasta mañana no los voy a poder ver, y hasta finales de semana no me podre instalar. Mañana llega Vicente con su mujer, con lo cual me tengo que trasladar al piso de Oscar con su familia, ya que allí tienen dos habitaciones y es mas amplio, y por esa razón no voy a tener Internet tan a menudo, pero no os preocupeís que daré señales de vida.

La verdad que el haber llegado a un país nuevo y tener gente que te puede guiar, me ha echo las cosas muy fáciles, la mujer de Oscar, Susana, y su hijo, Hugo, son un encanto, y se preocupan mucho por mi, y por lo que necesito, y ahora que llega Vicente, mejor aún.

Bueno os voy a seguir contado cositas de aquí. Lo primero de todo, la moneda que se utiliza aquí es el peso chileno, y tiene el símbolo del dolar, y para que os hagáis a la idea, 1€ equivale a 600$, y el billete que mas vale es le de 20.000 $, y la moneda mas pequeña es de un peso. En la foto esta el billete de 1.000, el de 2.000, 5.000, 10.000 y 20.000 y las monedas, las de abajo del todo son la de 10 y 50 pesos, las del medio son de 100 las dos, pero en diferentes formas, y las de arriba las de 500, también 2 monedas diferentes, aunque del mismo valor.

Algo que me ha llamado mucho la atención, ha sido el transporte público, los autobuses los llaman colectivos, pero hay dos tipos, los primeros son autobuses, destartalados, y mal acondicionados, de echo da penita montar en uno de ellos, y cada uno tiene su ruta, y luego están algo parecido a taxis, pero que no son taxis, también funcionan como autobuses, tienen su ruta, y tu te montas y pagas la misma cantidad, por recorrer una manzana que la ruta entera que tenga ese coche que has cogido, y no es exclusivo, es decir, tu te montas y en la siguiente parada se pueden montar otras tres personas, vamos que igual que un autobús pero en coche, y con ellos hay que tener mucho cuidado, porque tanto los autobuses grandes, como los coches, son los reyes de la carretera, se te cruzan, no respetan los cedas, vamos que se creen que tienen prioridad sobre los demás.

Por otra parte cuando tu vas conduciendo por el centro, en cualquier semáforo que te toque parar, siempre hay gente que te intenta vender periódicos, fruta, limpiar el coche, y gente haciendo todo tipo de malabares, desde las cariocas, o malabares con fuego, pelotas de baloncesto, hasta participantes de circo que hacen un miniespectáculo de equilibrio con dos personas, y sorprendentemente la gente les da dinero, cosa que en España, rara vez se hace. Eso en la ciudad, y cuando estas en carretera ves a un montón de gente haciendo autostop, aquí es de lo mas normal del mundo.

Los fines de semana, el centro y los alrededores se llenan de puestecitos artesanos, no son nada baratos, pero la mayoría lo tienen muy bien preparado. Aquí en Chile es uno de los grandes productores de cobre y oro del mundo, y trabajan mucho con ello. Un material, muy usado aquí, es la "alpaca" es una aleación con cobre, plata, y otro metal que no me acuerdo, y hacen unas autenticas filigranas. La lana también la trabajan bastante, y hacen alfombras, ponchos, gorros de todo.

Como veis, es pura artesanía, la mujer se tira, prácticamente toda la mañana tejiendo, y trabajan con colores muy vivos. La señora fue muy amable y no le importo que le fotografiara, al igual que la chica que tenia el puesto de "bisutería" que también era todo manual, y tenia unas cosas preciosas. La apariencia de la alpaca es como la plata, pero no brilla tanto, y no esta tan pulida, pero estaba muy bien trabajado.

El domingo de la semana pasada visite el mercado de fruta y verdura, y el puerto de Coquimbo. Coquimbo es como la capital de esta región, que es la cuarta de Chile, y esta pegando a La Serena, vamos como Alcalá y Alcobendas,que están pegada la una a la otra y no se sabe cuando empieza la una y cuando la otra, y como la playa tiene forma de media luna se ve la serena desde el mercado.

El mercado de la fruta y verdura, es como el mercadillo que puede haber en cualquier sitio de España, tienes puestos de todo tipo, incluso de artículos de segunda mano. Me han recomendado que es mejor comprar la fruta y la verdura en estos mercados ( en la Serena hay otro pero todavía no lo conozco) porque los productos son algo mejores, y están un pelín mas barato, pero tampoco es tanta la diferencia. Compre calabacines, zanahorias y cebollas, y sinceramente !me quedo con las de la huerta de mi padre!.

Y luego fuimos al mercado del pescado, que me lo esperaba de una forma totalmente diferente, la verdad es que me decepciono bastante. Primero antes de entrar al recinto donde están todos los puestos de los pescadores, tienen puestos fuera y olía a pescado podrido que era casi inaguantable, yo creo que ahí ya empecé a poner mala cara y no me convenció nada, a parte son puestos que están desprovistos de cualquier tipo de higiene, de esos puestos, creo que solo se alimentan los leones marinos que viven en el puerto, tienen comida gratis y sin esfuerzo todos los días y tienen una pequeña colonia allí formada.

Aquí veis el puesto de pescado, en serio, el olor era nauseabundo, el pescado lo ponen sobre placas metálicas, pero no tienen hielo para mantenerlo fresco, y cuando fuimos eran la 13, y aunque sea inverno, el sol calienta, y lo sorprendente es que, ¡la gente compra el pescado en esos puestos!.

Cando entramos en los puestos que están " acondicionados" la situación tampoco mejoro mucho, lo único que no olía a pescado podrido, olía a mar, pero la forma de presentar el pescado es el mismo, sobre una superficie metálica o sobre azulejos, sin mantenerlo en hielo.

Por otra parte, en casi todos los puestos, te venden como una especie de revuelto de marisco crudo, y ves a todo el mundo comiéndolo, y tiene que estar bueno, por lo que dicen, pero no me atreví a probar nada, es más, no creo que compre mucho pescado fresco tal y como lo tienen aquí, no me da ninguna seguridad, llamadme tiquis miquis, pero en serio, es para verlo. Si compro pescado será un día que llegue a primera hora y sepa que es del día, por que si no, me parece a mi que con la merluza congelada me apaño.

Y para no dejaros mal sabor de boca, os dejo algunas vistas de la playa de Coquimbo, y otra panorámica de lo que veo cuando estoy en campo trabajando.